Veredicto histórico en Miami: Tesla condenada a pagar 243 millones de dólares tras un accidente mortal

Veredicto histórico en Miami: Tesla condenada a pagar 243 millones de dólares tras un accidente mortal

TLDR : Tesla fue considerada parcialmente responsable de un accidente mortal que involucró su sistema Autopilot en 2019. Esta decisión podría influir en otros juicios futuros, mientras que Tesla planea apelar el veredicto.

El pasado viernes, Tesla fue considerada parcialmente responsable de un accidente mortal que involucró uno de sus Model S en modo Autopilot. Este veredicto podría influir en otros juicios futuros y llega en un momento estratégico para el fabricante, que está comenzando las primeras pruebas de sus robotaxis en Estados Unidos. Tiene la intención de apelar este fallo.
 
El accidente se remonta a julio de 2019, en Florida. George McGee circulaba a gran velocidad en una carretera de Key Largo a bordo de un Tesla Model S activado en modo Autopilot aunque no estaba en una autopista, cuando perdió el control del vehículo. Según los detalles del juicio, intentó recuperar el teléfono móvil que acababa de dejar caer y chocó contra un Chevrolet estacionado cerca de una intersección mientras sus propietarios estaban muy cerca. El impacto fue tan violento que Naibel Benavides Leon, de 22 años, murió instantáneamente, siendo proyectada a varios metros de distancia, mientras que su compañero, Dillon Angulo, sufrió varias fracturas y un traumatismo craneal.  Aún sufre secuelas del accidente, ya que llegó a la audiencia cojeando.
 
George McGee pensaba que podía confiar en el Autopilot para evitar cualquier colisión, pero al inclinarse para recoger su teléfono, presionó el pedal del acelerador y lo desactivó. También fue considerado responsable, pero ya había llegado a un acuerdo confidencial con los demandantes en 2021. Tesla intentó hacer lo mismo, como suele hacerlo para evitar mala publicidad, pero sin éxito.
Los sistemas avanzados de asistencia a la conducción de nivel 2 como el Autopilot de Tesla ofrecen una automatización parcial de la conducción. Controlan la dirección, la aceleración y la desaceleración, pero el conductor humano debe permanecer completamente comprometido con la conducción y poder retomar el control del vehículo en cualquier momento. El abogado principal de Tesla, Joel Smith, recordó que los conductores son advertidos de la necesidad de esta supervisión, lo que ha permitido a la empresa ganar varios juicios en el pasado.
Si bien Brett Schreiber, el abogado de los derechos de la víctima y de Dillon Angulo, reconoce la negligencia de George McGee, afirma que Tesla sabía perfectamente que muchos conductores activaban el sistema Autopilot en carreteras para las que no estaba diseñado, sin haber intentado impedirlo. También cuestiona la comunicación de Elon Musk, acostumbrado a anuncios espectaculares pero a menudo prematuros, que considera en contradicción con las capacidades reales del sistema. Según él, la elección del término "Autopilot" en lugar de "Copilot" contribuye a inducir a error a los usuarios, haciéndoles creer en una autonomía que el sistema no garantiza.
Tesla, reconocida responsable en un 33 %, disputa toda responsabilidad. La empresa enfrentará al mismo abogado a finales de octubre próximo, por un accidente también ocurrido en 2019, en el que un joven de 15 años, Jovani Maldonado Garcia, falleció. Allí también, el Model en modo Autopilot chocó contra otro automóvil, que estaba cambiando de carril.
La denominación de la opción de pago Full Self Driving (FSD) también lleva a confusión: también entra en la categoría 2 de los ADAS, requiere la vigilancia del conductor. La Dirección General de la Competencia, el Consumo y la Represión de Fraudes (DGCCRF) ordenó además a Tesla Francia el 24 de junio pasado, "cesar sus prácticas comerciales engañosas" en cuanto a la presentación de la opción.
Elon Musk acaba de anunciar en X el desarrollo de una versión con diez veces más parámetros y una importante reducción de la pérdida de compresión, lo que debería mejorar la calidad de los datos visuales tratados por el vehículo. Si las pruebas internas se desarrollan como está previsto, podría estar disponible para el público a finales de septiembre próximo. ¿Estarán los clientes de Tesla preparados para confiar en él?